Let it be...#6O7
Dormí toda la tarde y cuando eran
casi las ocho, Sofía me despertó pues tenía que cambiarme y alistar mis cosas
ya que en cuestión de horas nos iríamos. Llamé a Kate y a Delilah, quienes
estaban por salir de la casa de la primera; Sofía y yo tomamos nuestras
maletas, abordamos un taxi y pronto nos reunimos las cuatro en el aeropuerto de
la ciudad. Cansadas y emocionadas, esperábamos cosas buenas de Dinamarca…
Eran las diez de la noche en punto y
hacía mucho tiempo que no me sentía tan inquieto, pasaban muchas cosas por mi
cabeza, no podía sacar de mi mente aquella extraña escena de María y yo besándonos
en el ascensor, no podía y no quería olvidar esa sensación que se confundía con
el asombro y el placer. Fumaba un cigarrillo más, maldito vicio, pero el mejor
de los amigos en una situación de crisis emocional; John, Paul y Ringo tenían
sus asuntos y ya no platicábamos ni convivíamos como en otros tiempos, cada
quien se las arreglaba como podía.
Tallé un poco mi rostro con mis
manos y me senté al borde de la cama, Astrid se movió para acomodarse y fue
cuando aterricé, ella estaba ahí a un lado mío, durmiendo, cubriendo su cuerpo
desnudo con las suaves cobijas… me sentía raro; quería a Astrid, sí, pero ella
al igual que yo sólo buscaba un poco de compañía en ese momento turbio de su
vida en el que seguramente se sentía igual que yo: sola y atrapada. Antes de
pasar mi primera noche con ella hablamos, durante horas, ella no quería atarme
a una relación y tampoco quería compromisos, sin embargo, quería mi compañía y
todo aquello que una relación “no amistosa” entre un chico y una chica, puede
existir. Acepté.
Me sentía más tranquilo ahora con mi
vida, me sentía mejor sabiendo que María no me odiaba del todo y que las
posibilidades de ser amigos y quizá estar con ella de nuevo, existían… pero
seguía sintiéndome atrapado, parecía que mi vida llevaba una eternidad pausada
y yo no hacía nada para cambiarlo; estaba aburrido de lo mismo, incluso mi
propia casa me fastidiaba, necesitaba algo más y pronto pensé que para
encontrar la respuesta, uno debe volver a las raíces, como empezar de cero.
-Astrid…- la llamé en un tono medio
para no despertarla bruscamente
-mmh…- ella se dio la vuelta pero no
abrió los ojos
-Oye Astrid… despierta- la moví un
poco y ella por fin despertó, abrió lentamente sus ojos hasta que estos me
miraron. Sonreí y acaricié su frente.
-¿Qué pasa?- preguntó contagiada por
mi sonrisa
-Vístete y haz un par de maletas,
iremos a Liverpool- contesté aún sonriendo, ella saltó un poco la expresión de
su mirada e intentó sentarse.
-¿Liverpool? ¿Por qué? ¿Ha pasado
algo?- preguntó preocupada
-No, nada grave afortunadamente,
sólo me surgió este deseo por volver y visitar a mis padres. Estarán felices de
verte.- me levanté y comencé a vestirme, ella intentaba encontrar sus ropa. Comencé
a sacar felizmente la ropa que llevaría, no era mucha pues mi estancia duraría
al menos cuatro días.
Tenía listas mis maletas, le dije
que tomaríamos el tren porque no tenía deseo de conducir, ella continuaba
haciendo sus cosas en silencio hasta que todo parecía estar listo.
-George… me siento un poco insegura.
Creo que tus padres no aprobarán lo nuestro- La miré de inmediato, bastante
extrañado por su comentario pero ella parecía realmente afectada por la idea.
-Tonterías…
-Ellos estuvieron acostumbrados a
María por mucho tiempo, que de pronto llegues conmigo en un plan… el que sea,
¿no crees que llegue a desconcertarlos?- Astrid me encaró y parecía irritada
por mi reacción tan relajada ante el estrés que ella comenzaba a presentar.
-Astrid, mis padres te conocen desde
siempre. Has ido a mi casa infinidad de veces… ellos te aprecian sin importar
la relación que lleves conmigo- la tomé de los hombros y ella me dio una media
sonrisa.
-Tienes razón, creo que estoy
exagerando las cosas. Tal vez es la culpa, que me come viva- se dio la vuelta
para tomar sus maletas.
-¿Culpa?
-Sabes a qué me refiero
-Déjate de tonterías, Astrid.
Estamos juntos porque es inevitable ¿No es así?- ella sonrió y besé sus labios,
tan ajenos y distintos.
Estábamos por salir cuando el
teléfono comenzó a sonar.
-¿Diga?
-George, habla Paul. Oye ¿Sabes dónde
demonios está Lennon?
-¿John? No, ¿Por qué habría de
saberlo?
-No lo sé, pensé que estaría contigo
y con Astrid, llevo todo el día buscándolo.
-Paul, Lennon lleva varios días
desapareciendo en cuanto tiene la oportunidad, incluso antes de esa fiesta, no
sabíamos mucho de él ¿O sí?
-Lo sé, lo sé, pero me urge
encontrarlo, también a Ringo, es un milagro haberte encontrado a ti.- Por su
tono, parecía alterado, como lo venía pareciendo los recientes meses.
-¿Por qué la urgencia?
-Tenemos que reunirnos cuanto antes
-¿Ha pasado algo grave?
-Grave no, pero sí malo. Esos tipos,
con los que Brian hizo el contrato por las películas ¿Los recuerdas?
-Sí, qué con ellos…
-Bueno, reaparecieron, como no hay
algún representante como tal, hablaron con George Martin, le dijeron que les
debíamos un último material fílmico.
-¿Qué? ¿Me estás jodiendo? ¿No se
supone que esa cuenta se saldaba con Yellow Submarine?- casi vomito sangre
-Se supone, tú lo has dicho, pero no
les fue suficiente. Sintieron que nuestra aparición al final de la película fue
una burla hacia su empresa, por lo tanto, los muy cabrones nos quieren ver en
una película más y yo no sé tú, pero a mí no me queda cabeza para más. He
pensado y vuelto a pensar y no hay nada que considere que podamos hacer.
-Qué se jodan, Paul, yo no haré
nada. No haremos nada, si gustan, nos pueden demandar.
-Eso no es conveniente ahora George…
-¿Qué podrían hacernos?
-¿Ahora? Mucho. ¿Acaso no sabes que
estamos casi en la quiebra?
-¡¿Qué?! ¿Desde cuándo? ¿Por qué
nadie nos ha hablado de eso?- Hasta ese punto tomé en serio la conversación y
todo sentimiento positivo desapareció. Astrid estaba tan atenta como yo y se
sentó cerca de mí.
-Harrison, por favor, hemos enviado
cartas, telegramas, fax y parece Martin y yo estamos comunicándonos con la
pared. Lennon ya lo sabe y pareció importarle una mierda. De Ringo puedo
entenderlo, ¿Pero tú? ¿Cuál es tu excusa?
-Si no hicieran llamados para cosas
estúpidas, como las que has hecho últimamente…
-¿Cosas estúpidas? George, soy el
único que parece preocupado por el futuro de esta banda, por su economía. He
hecho hasta lo imposible, les hablé del nuevo material, ¡no he cesado y ustedes
simplemente tiran todo por la borda!- Paul comenzó a gritar y Astrid me miraba
preocupada, nunca nos había escuchado discutir.
-Claro, pobre de ti, quizá se deba a
eso, que desde que murió Brian todo parece tratarse de ti, no de la banda. Te
anticipo que no podré ir a tu reunión, salgo esta misma noche a Liverpool.
-¡Perfecto! Lárgate a donde quieras,
cuando la banda esté arruinada y no tengas nada de lo que ahora gozas, no
vengas a buscarme ni hagas tus comentarios porque yo estaré ocupado en mis
asuntos y no tendré tiempo para ti, ni para ninguno de los otros dos.
-¡Ah! Papá Paul me está amenazando…
no dependemos de ti, McCartney, además serías la última persona a la que yo
recurriría en una mala situación, eres egoísta y vanidoso. Así que metete tus
asuntos y tu tiempo de mierda por el culo.
-¡Te vas a arrepentir Harrison, te
vas a arrepentir!
-Eso quisieras…
-Ya veremos si el mediocre de Lennon
se arriesga en hacer algo contigo, él también sabe que eres un músico pobre.-
La irá que sentí en ese momento fue indescriptible, era un comentario infantil,
sí, pero todo ese largo tiempo con la banda, me habían relegado como compositor
de música y letras. No sólo era Paul el engreído, John también tenía esa idea
absurda de que sin él estaríamos perdidos y por eso ahora se largaba cuando
quería, era más su necesidad de sentirse indispensable y de meterse en líos.
-Te doy una semana, no más, una sola
semana para que puedas hacer algo sin nosotros Paul. Estoy seguro que
terminarás tragándote tus palabras- colgué e intenté no romper nada, no
comenzar a gritar y ponerme colérico por el asunto, menos con Astrid, ella no
tenía porqué escucharme ni porqué enredarse en esos líos.
-George…-me tomó del hombro –No me agrada eso ¿sabes?,
no te das una idea de lo triste que es escucharlos discutir de esa manera.
Ustedes son amigos antes que ser Beatles, no deberían olvidar eso...
Esto me recuerda una canción que más o menos dice así "Todo se derrumbó...", porque sí, los Beatles nos comenzarían a romper el corazón con sus discusiones provocadas por el exceso de arena que tenían en la vagi... qué triste, en serio.
Tengo que contarles algo:
Iba a poner la relación de George y Astrid muy equis porque es obvio que Harrison siempre estará atado a María, but, ayer estaba viendo cosas en Youtube xD, eran tops o conteos, como los conozcan mejor jaja; la cuestión es que uno era de "Personajes que no tuvieron ningún crecimiento o giro en la película" o algo así (sí super extenso) y entre las pelis y personajes se encontraba el de Ryan Gosling en The Notebook (película que no he visto y preferiría morir sin ver)y mencionaban que en toda la película no existió un giró en el personaje, pues sólo se trató de un tipo que conoció a una chica de la que se enamora, se separan y se reencuentran... y él sigue enamorado de ella (Y lucha por ella, llora por ella) entonces me asusté con lo que estaba haciendo del pobre George y decidí darles un buena oportunidad a él y Astrid aunque todas sabemos, que su primer y gran amor siempre será María.
Pasando esto creo que puedo despedirme, me gustaría su opinión al respecto.
Gracias por sus comentarios, espero que esto les haga más llevadero el domingo si es que lo odian tanto como yo jaja.

Mmmhhh Astrid 😒😒😒😒 la amo pero no puedo dejar de pensar en ella como un mueble de decoración y nada más.
ResponderEliminarEs ojete que George sólo esté con ella por falta de compañía pero igual ella ya sabía a lo que le tiraba.
Mis muchachos adorados ya empezaron con sus mamadas de ego y falta de varo... Es triste pero todos sabemos que así fue :(
Esa película es la cosa más cursi que verás. Es muy bonita visualmente, sobre todo por la ropa que usa la protagonista, pero la historia en sí es como un berrinche bien fomentado de 2 adolescentes. Igual deberías checarla.
Pd. Esos 4 andan de culos rotos. Astrid te amo pero en éste capítulo quiero decirte que tienes cara empanizada con arena de gato. (sólo por éste capítulo). Apruebo que salga más la nueva relación de esos 2 😂😂😂😂
Hijaaa porque? Jajajajajaja me gustó el capítulo pero odio recordar lo mal que se llevaban en esa epoca :( y pues bueno, si es tu decisión poner a George con Astrid en una relación pues ya que (aunque me queme y me lastime) jjajajaja ya no se que esperar del final, (conociendo tus finales inesperados) xD me da miedo jajajjajaja aún ando sentimental por honey pie :'( espero que aquí si haya un final feliz y un vivieron juntos por siempre jajjajajaja bueno me voy y pues también yo odio los domingos, son fastidiosos xD te quieramo hija ♡
ResponderEliminarHola, Frida!!
ResponderEliminarMe encanta como escribes y como te sumerges en las perspectivas de un personaje principal en la historia, que es la narración de Harrison ❤.
Dioss, esta época es complicada para todas nosotras y sobre todo para los Beatles. La lucha de egos y la apatía son el principal motor que lleva a provocar estas inevitables discuciones. Me partió el alma lo que dijo Astrid al final 😭😭. Te da nostalgia después de todo como van cambiando las cosas y que va haber un momento en que se termine un ciclo. Astrid me cae súper bien pero no me da ternura que esté con Harrison. Los papás de Harrison les amo,(suegros perfectos para mí) a ver si en el prox. capítulo salen.
Qué bueno que no tardaste nada en subir. Muchas gracias por tu apoyo en leer mi fic y me da emoción de pensar que lo estás leyendo. Ojalá te siga gustando.
Yo igual aborresco los domingos por pensar que mañana es lunes y porque son familiares, yo en lo personal, es un tanto fastidioso a veces convivir con la familia que en ocaciones sólo está para mandarte y criticarte jajaja.
Cuídate mucho, Frida!!
Espero el siguiente pronto😊
Que gusto amargo al ver q George hace cosas con Astrid que hacia con María.
ResponderEliminarCasualidad, estoy viendo let it be... y Paul canta Bésame mucho
Espero el proximo