Abbey Road...#635

-Oye Kate, estaba pensando que aún no has buscado quién diseñe tu vestido ¿Quieres que contacte a alguien?- preguntaba Ringo mientras veía a Kate, quien miraba por la ventanilla del avión que tomaban para regresar a Londres.

-Ringo, amor ¿Olvidas que diseñamos la ropa para nuestra propia boutique?- contestó riendo –Yo misma lo diseñaré y sólo buscaré un buen costurero.- agregó sonriente.

-¿De verdad?

-Sí, ya que no creo encontrar algo que me convenza del todo, mejor yo misma lo diseño.

-Tienes razón amor, entonces ¿me ayudarías diseñando mi traje?

-Claro que sí amor, será muy bonito hacer eso juntos.

-Pero… ¿no se supone que el novio no tiene que ver el vestido ates de la boda?- preguntó realmente preocupado a lo que Kate explotó a carcajadas.

-¡No amor! El novio no tiene que ver a la novia con su vestido puesto antes de la boda. Dicen que es de mala suerte- respondió aún divertida.

-Ah cierto- comenzó a reírse un Ringo muy sonrojado –Siempre olvido ese tipo de cosas.

-Es mejor, no tienen mucha importancia, para ser sinceros.

-Te he pedido matrimonio y ni te he dado anillo de compromiso, no sé cómo hago para que me salgan las cosas al revés- dijo rascando su cabeza.

-Ay Ringo, no era necesario, me hiciste explotar de alegría cuando pronunciaste esas palabras ¿qué más da un anillo?

-Aún así quiero dártelo, no te opongas por favor.

-Jamás haré algo que pueda herirte Ringo, créeme- Kate besó a Ringo con ternura y durante el viaje comenzaron a hacer una lista de las cosas necesarias para la boda, desde lo mínimo como servilletas y adornos, hasta el lugar donde se celebraría.

-¿Crees que sea conveniente que mis hijos estén presentes?- preguntaba Ringo, de pronto su semblante cambió a serio y parecía preocupado.

-Si tú lo crees y lo deseas, entonces sí. Son tus hijos y merecen estar en cada momento de tu vida.

-Pero…-se quedó callado al pensar que si continuaba con el tema podría malinterpretarse.

-¿Te preocupa lo que tu ex esposa piense?

-Sí, bastante.

-¿Ella no se ha vuelto a casar?

-No

-¿Tiene pareja?

-No lo sé…

-Querido… creo que ambos deben hablar- dijo ella tomando de la mano a Ringo, invitándolo a un encuentro a solas con su ex mujer, donde sólo ellos dos decidirían la asistencia de sus hijos en la boda.

Al amanecer y teniendo todas mis cosas listas salí de casa siendo acompañada por David quien me ayudó con las maletas, pero antes de salir directamente al aeropuerto, pasé a casa de Paul para dejarle a Sofía el trabajo que adelanté para esa semana, pero al llegar a casa de McCartney escuché una guitarra afinando. Toqué y él atendió.

-Paul… ¿qué haces despierto a esta hora?

-Estaba a punto de cantarle una canción a tu prima

-¿Una serenata?

-Así es… ¿Venías a verla?

-Sí, sólo quería entregarle estas cosas, no me iba a tardar.

-¿Te molesta esperar hasta que termine?

-No, no, adelante- contesté ansiosa por escuchar qué le cantaría. Hizo los últimos ajustes en su guitarra y comenzó únicamente con un fuerte “Oh Darling”.

-“Oh! Darling, please believe me. I'll never do you no harm. Believe me when I tell you. I'll never do you no harm…”

Como Sofía estaba tardando en salir y no porque no quisiera, sino porque seguramente estaba en la quinta galaxia, lancé una piedra a su ventana, Paul me miró extrañado por la acción y yo sólo me encogí de hombros.

Sofía salió y escuchó atenta la canción de Paul, su rostro parecía cambiar y ahora lucía más tranquila y enamorada; cuando McCartney terminó una voz nos asustó.

-Es increíble- dijo David, asomándose por el portón de la casa de McCartney, al notar nosotros que él se metió, comenzamos a reírnos.

-Gracias amigo. ¿Qué piensas tú?- le preguntó Paul a Sofía, ella sonrió.

-Es perfecta Paul…

-Y es para ti

-Gracias- ambos se sonrieron y pese a que el tiempo del vuelo se me venía encima quise preguntar.

-¿Qué pasó?

-Nada, malos entendidos- se adelantó ella

-Eso espero

-De verdad- insistió

-Está bien. Oye, sólo vine a dejar estas cosas del trabajo, sabes que me ausentaré y no quería dejar a mis discípulos sin hacer nada- comenté.

-Oh está bien, Paul ¿puedes…?

-Claro…- él recibió lo que yo llevaba

-Nos vemos y pórtense bien- me despedí

-Suerte María, disfruta… el viaje- omitió Sofía para no inquietar a Paul.

David y yo salimos ahora sí al aeropuerto, me ayudó a con mi equipaje, se despidió de mí pidiéndome que me cuidara y toda la cursilería posible; me besaba, me abrazaba fuerte y me decía que me extrañaría, yo contestaba a sus mimos pero no podía ocultar lo mucho que me emocionaba ver de nuevo a mis amigas y especialmente, volver a casa.

Era el medio día y estaba solo en casa, estaba tan harto del ambiente tan pesado, del cansancio que sentía de estar ahí… hasta que me decidí por tomar en serio el asunto. Fui hasta la cocina y de la puerta del refrigerador, desprendí el número de María, ella podría ayudarme a buscar mi nuevo hogar. Llame una, dos… tres veces y nadie contestó, lo hice en diferentes tiempos por lo cual supuse que estaría en el trabajo y allá la fui a buscar.

Cuando llegué me encontré con Sofía y Twiggy, saludé a ambas pero pedí platicar a solas con la primera.

-George, vaya sorpresa ¿está todo bien?- preguntó Sofía

-No, estoy buscando a María, bueno, llamé a su casa pero no me contesta…

-¡Ah! Es porque no está. Salió esta mañana a Liverpool, en los próximos días será la boda de Montse.

-¡Cierto! Lo olvidé por completo, a buena hora se me ocurrió buscarla- contesté un poco pensativo.

-¿Hay alguna razón especifica por la cual la buscas?

-Sí, quería pedir su ayuda para buscar una nueva casa.

-Ya entiendo, ¿te ha hablado ya de la inmobiliaria…?

-¿McAvoy? Sí. Me dio este número, dijo que llamara diciendo que soy un recomendado suyo.

-Hazlo, te darán una cita para que te encuentres con la promotora, pueden ir juntos a buscar sitios o bien, puede mostrarte catálogos de acuerdo a las descripciones que le des.

-De acuerdo, será mejor que vaya no hay problema si voy antes de pactar cita ¿verdad?

-No, ellos siempre atienden a sus clientes.

-Muy bien, pues muchas gracias…- Me desanimaba un poco no ser acompañado por María, quería pasar tiempo con ella y había asuntos que quería platicar con ella pues siempre me daba muy buenos consejos, era muy paciente y tenía un gusto peculiar de ayudar a las personas a sentirse mejor.

-¿Estás bien?

-Sí, todo bien. Hasta luego Sofi, espero que pronto nos reunamos, salúdame a Paul.-Le di un beso en la mejilla y conduje hasta las inmobiliaria, ahí pregunté por Maggie McAvoy, quien al parecer era prima del dueño o algo así.

Ella me atendió y todos los empleados me trataban con exagerada amabilidad y respeto, eran acciones que me molestaban ya que sabía que se debía por el sencillo hecho de ser un “Beatle”.

-Señor Harrison…

-Dime George

-Bien, George, toma asiento por favor.  Dime ¿con qué te podemos ayudar? ¿Qué buscas en específico?

-Quiero una casa amplia, con un jardín enorme y por favor, que no se encuentre en el centro de la ciudad.

-Vaya, será un poco complicado… pero buscaremos arduamente.

-¿Tienen algunas opciones?

-Sí, claro, este es nuestro catálogo

-Perfecto.- Comencé a ver el catálogo y nada me convencía, tenían casas muy lindas, pero ninguna me enamoraba lo suficiente.

-¿Encontraste alguna de tu agrado?

-No.

-Vaya… la siguiente semana traerán uno nuevo, puedo llamarte si lo deseas.-Me quedé observando las cosas sobre el escritorio que estaba detrás de la chica y me llamó la atención una foto donde estaba ella junto con un tipo de sonrisa amplia y bien parecido, ese tipo de “adonis” que las chicas aman.

-¿Él es el dueño?- pregunté fijándome en el contexto de la foto

-Oh sí, es mi primo. James McAvoy

-¿Están en Irlanda?- pregunté al notar el castillo que se asomaba en una esquina de la foto.

-No, ese es uno de los pocos castillos que estuvieron en venta aquí en Inglaterra, es del padre de James.

-Mencionaste que es uno de los pocos castillos que estaban a la venta ¿Queda otro?

-Quedaba… bueno sí, está deshabitado y de seguir ignorado podrían demolerlo; está ubicado en Hanley-on-Thames, en Oxfordshire. Por lo poco que sé, posee un estilo neogótico, cuenta con 120 habitaciones y fue propiedad de Sir Frank Crisp, quien al parecer era un acaudalado abogado.

-¿Y por qué dices que no está a la venta?

-Hemos intentado contactar a los últimos propietarios de la mansión, que era una hermandad de Monjas que había establecido un colegio, “The sacred Heart School”, pero hace apenas un año y medio decidieron dejar el inmueble por los múltiples daños que tiene debido al tiempo. Creo que pensaron que restaurarlo saldría más caro y lo dejaron al cuidado de un anciano, un veterano de guerra quien parece no separase de la pequeña caseta del lugar. Él no nos da información sobre las monjas, no sabemos cómo localizarlas, hemos intentado por todos los medios, pero cómo ves, nada nos ayuda y decidimos invertir ese dinero en otras propiedades, más pequeñas pero en mayor cantidad.

-Entiendo, es lo mejor que pueden hacer, no deberían perder tiempo intentando cerrar un trato que al parecer, jamás se dará- fingí estar interesado por su problema, cuando realmente lo que quería, era tenerlos lejos de la propiedad para intentar convencer a aquel viejo huraño, por mis propios medios.

Me levanté y me despedí de la chica, ella repitió que podía volver la siguiente semana, yo agradecí y después de regalarle una sonrisa “amable” salí a toda prisa para subir a mi auto y dirigirme a la dirección que memoricé. Ansiaba conocer ese castillo, quería saber si era tan fantástico como lo imaginé y, teniendo esa idea invadiendo mi cabeza por completo, supe que ya no daría marcha atrás.

-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

¡Qué pinche bello se ve Harrison ahí!

Joan: Lamento que la escena entre María y David no haya continuado en este capítulo xD pero te di unos minutillos de George.

Sofía: No recuerdo si alguna vez te platiqué de esa persona de "mi pasado", creo que debió ser en una charla efímera, tengo un recuerdo muy vago de eso. Y no, no es el tipo del que te hablaba cuando nos conocimos jaja él bueno... ya es papa casada y asunto olvidado.

Doris: JAJAJA no puedo con las burlas que le echas al "broken ass" de Rick pero se lo tiene bien merecido, eso sí. Creo que falta que Jones se entere :P

Michelle: lo de Roger es puro cuento y ya en próximos capítulos verán a qué me refiero, eso de que quiere con María es la mejor de sus ocurrencias. Ojalá pudieras ver al real jajaja yo me muero xD.

Pasen un buen domingo :3