Abbey Road...#637

Cuando fuimos a la sala donde ella me ensañaba algunas cosas que había comprado recientemente, alguien llamó a la puerta, mi madre fue a atender y  al no escuchar nada, decidí ir a asomarme, cuando…

-¡Montse!- grité de la emoción, ella estaba ahí, sonriente, divertida de darme una sorpresa justo como lo había planeado, aunque no sería todo.

-María, hora ¿cómo estás? Mírate, no te recordaba así, te ves demasiado bien…

-¿Y con eso qué intentas decirme?

-Nada, torpe, ven y abrázame- ambas reímos y nos regalamos un abrazo fuerte y duradero. Ver a Montse parada frente a la puerta de mi antigua casa me hacía sentir como en aquel ’58 donde ellas iban a buscarme para ir a la escuela o para salir, y verla ahí, tan crecida, tan cambiada y después de todo lo que habíamos vivido, era como el mejor regalo del mundo.

-¿Quieres entonces que vayamos de una vez a revisar las zonas donde se llevará a cabo la sesión?- pregunté en seguida

-No, eso ya lo tengo resuelto, la verdad…

-No entiendo…

-Quiero que vayas a mi casa conmigo.

-De acuerdo.- Sin preguntar más me despedí de mi madre y Montse y yo caminamos hasta su antigua casa.

-Se siente tan raro estar aquí de nuevo ¿No lo crees?

-Demasiado, veía los cambios que le han hecho al vecindario y me asombré al darme cuenta de que Pete Best y su familia ya no viven por aquí.-Comenté

-No, ellos se fueron después del fracaso de Best con los Beatles y la otra banda que intentó lanzar, al parecer dándose cuenta de que realmente no era por él que la banda era popular, tal y como él creía.-Ambas reímos al recordar esa parte de la historia.

-¿recuerdas cuando nos reuníamos en aquella parada de autobús para ir a la escuela?

-Sí, siempre venías con Pam y Jasso, muchas veces nos veíamos hasta la escuela.- ella contaba

-No puedo creer que él y tú se casen… es decir todos éramos muy cercanos y además lo bateaste súper feo- ambas reímos y ella mostraba un ligero sonrojo.

-Lo sé, muchas veces fui muy cruel con él, pero su muestra de verdadero cariño fue lo que me hizo aceptar, siempre nos llevamos bien aunque bromeábamos pesado, pero al final de todo me demostró ser un buen hombre y tenía aquellas cualidades que Paul no tenía. Creo que después de un tiempo entendí que McCartney sólo me gustaba porque era guapo.- confesó riendo y era extrañísimo que ella me hablara ahora de Paul después de llevar ya bastante tiempo de no asociarlos, pues para mí ya no había nadie más en mente, junto a Paul, que mi prima Sofía.

-Supe que le anduviste una carta donde lo “perdonabas”…-

-¿Cómo es que te enteraste? Creí que sería asunto sólo de nosotros dos, ¿No se le ha quitado lo chismoso?-preguntaba burlona

-No sé qué tan conveniente sea…

-Vamos ya sabes que insistiré tanto hasta convertirme en un fastidio

-Noto que eso no ha cambiado en ti

-Jamás

-Él… ha formalizado una relación con Sofía… mi prima ¿La recuerdas?- Montse se detuvo abruptamente, en ese momento no sabía si había hecho lo correcto, sabía que ella reaccionaría así.

-¿Sofía Gallagher?

-La misma

-¿Anda con Paul?

-No sólo anda con él… ya viven juntos-Pude notar la sorpresa en su rostro, quizá ella no esperaba que Paul volviera a enamorarse de nadie y mucho menos imaginaba que sería de mi prima, quien insistía tanto con él; Montse, de alguna manera se había enterado de que Sofía tenía un “crush” muy fuerte con Paul pero debido a que respetaba demasiado la relación que en aquellos días había entre mi amiga y el Beatle, decidió quedarse en las comodidades de Manchester para no tener que sufrir ni buscar a nadie.

-Vaya, es como el karma…

-¿Karma?- pregunté por muchas razones: en primera porque era la segunda persona a quien le escuchaba mencionar la palabra y segunda, porque no esperaba que ella dijera eso, ya que no tenía caso.

-Sí, es decir sé que él y yo ya no estamos juntos pero… piénsalo así: Sofía siempre estuvo enamorada de él y yo me enteré y, hoy, ellos están juntos.

-¿Y eso qué tiene “ Karamico”?- pregunté

-Que así como yo me quedé con Paul pese a que ustedes habían salido primero, cuando todos éramos adolescentes, ahora vivo un poco de aquella situación.

-De planto estás tonta…-dije molesta –Deja ya de pensar en esas tonterías o me harás pensar que te duele lo de Paul y que Jasso es…

-No, no, nada de eso, estoy feliz de casarme con César, pero pese a todo fueron muchos años junto a Paul. Supongo que ya me tocaba darme cuenta de que así como yo pude enamorarme de alguien más, él también lo haría, tarde o temprano.

-Pero no estás molesta con mi prima, ¿Cierto?

-Para nada, es mucho mejor que esté con ella a que esté con cualquier buscona que se aproveche de él- me reí fuerte por el calificativo de Montse para el resto de pretendientes de Paul. Cuando menos nos dimos cuenta, ya estábamos entrando a su patio y antes de entrar a su casa me pidió que esperara unos segundos afuera, ya que “tenía un nuevo perrito y era algo mordelón”.

Esperé afuera el tiempo que fue necesario, un minuto a lo mucho y ella volvió bastante sonriente, como si supiera algo que yo no y entré.

-Debemos ir a mi cuarto, tienes que probarte tu vestido de “Dama de honor”- dijo mientras subíamos a su habitación.

-Espera ¿Tú lo tienes?

-¡Claro! Le pedí ayuda a tu mamá con tus medidas y así fue que pude solicitar su costura, por eso ahora debemos ver cómo te queda y cómo te ves junto con las otras damas.

-¿Otras damas?- en seguida abrió su puerta y en su habitación había dos chicas ajustándose el vestido y subiendo su cremallera, cuando ellas nos miraron, se quedaron heladas, para después reaccionar.

-¡María!- Eran Pam y Alice

-¡Hola!- entré eufórica, abrazándolas, las tres gritábamos y hablábamos al mismo tiempo como locas. Montse reía divertida por lo que veía, y yo entendía que no tenía ningún perrito nuevo, sino una muy buena sorpresa para mí.

-Fuiste muy lejos Montse McCurdy.- ella soltó a reírse de mi estúpida expresión

-Me amas, me aman las tres y deben admitir que esto fue bastante bueno.

-Hasta que se te prende el foco y esta vez no es para golpear a nadie- dijo Pam.

-Entonces esos son los vestidos- dije mientras las observaba

-Sí, están lindos ¿no?- Contestó Alice quien, de las cuatro, había adquirido un semblante más maduro debido a que portaba unas gafas de pasta y un tinte distinto al oscuro, parecía que tenía treinta cuando era de mi edad.

-Bueno… ese color…

-Cállate no empieces, siempre te quejas de todo

-Tampoco has cambiado eso, María- me dijo Pam

-Cállense, así nos amamos. Aprovechando la reunión… Alice, tienes que ponerme al día con tus vivencias.

-¿Sobre qué?

-Alguien me dijo que tú y Best…

-¿De verdad?- casi grita Pam, quien por mucho tiempo, durante la adolescencia, fue pretendiente del rubio baterista.

-Así es…-contestó a regañadientes una Alice más sonrojada que unas mejillas con rubor.

-¡Uy! –Gritaron Montse y Pam

-Si siguen así las golpearé- todas reímos

-Yo sólo hablaré hasta que tú nos pongas al día de todo lo que sabes

-¿Respecto a qué?- pregunté

-No te hagas…

-Ni se imaginan, acaba de tirarme una bomba de camino a casa- agregó Montse refiriéndose a lo que le dije de Sofía.

-¡Cuenta!- pidieron Alice y Pam

-Primero déjenme probarme mi vestido ¿quieren?- Montse sacó mi vestido, era corte imperial y en un tono crema pastel; Pam, como era costumbre, se emocionó de vernos vestidas igual y de verme ceder.

-No me puedo quejar…

-No te puedes quejar porque es hermoso

-Nunca entenderé tus gustos Montse- finalicé y las demás rieron

-Nadie, por eso se casará con César- agregó Pam, sólo para continuar molestando.

-Es cierto Mon, por cierto ¿Sigue siendo igual de raro?- preguntó Alice, sentándose en la cama de Montse, Pam y yo hicimos lo mismo.

-¿Cómo que raro?

-Sí, ya sabes ¿Sigue emocionándose con  los autos viejos?- pregunté

-Clásicos- quiso componer

-No, no nos engañemos Mon, eran viejos…

-¿Sigue usando gel para levantar su cabello?- preguntó Pam

-¿Sigue usando playeras con imágenes de sus bandas preferidas?

-¿Y lentes de maratonista?- las tres estábamos riéndonos de las peculiaridades de Jasso, las cuales lo hacían el típico chico que se perfilaba a ser el tío incómodo de todos.

-Bueno basta, les recuerdo que es mi prometido- contestó Montse un poco molesta.

-También es nuestro mejor amigo y sabes que es verdad lo que decimos- respondió Alice y Montse seguía en una especie de puchero.

-Desmiéntenos…- intervino Pam, Montse nos miró a las tres y comenzó a reírse porque lamentablemente todo era la verdad.

-Sí, sigue siendo así, pero tengo la esperanza de que se le quite- reímos las cuatro y nos dejamos caer sobre su cama. Después nos cambiamos y le pregunté si no iríamos a ver los lugares para su sesión de fotos y Montse contestó “María, eso ya lo tengo resuelto, te quería hacer venir desde antes para que conviviéramos”.

Bajamos a preparar comida, postres y mientras todo estaba bebimos un poco de alcohol.

-No me dirás que esta será la despedida de soltera, ¿cierto?- comenté

-María, no sé en qué clase de ser pecaminoso te has transformado, pero no intentes arrastrarnos a la lujuria- contestó Montse

-Será mañana ¿verdad?- dijo Alice y Montse comenzó a reír

-Claro, este día era exclusivamente para nosotras.-

Posteriormente comimos y nos dedicamos a recordar bastantes cosas de la secundaria y la preparatoria, vivencias que tuvimos cuando fuimos una pequeña y efímera banda de Rock n’ roll y cuando las cosas con los Beatles comenzaron, me alegró ver que en general, las tres, tenían el asunto de su pasada relación muy superada; con Montse me sentía más tranquila porque a ella ya le había comentado lo de la relación de Paul con Sofía, pero no sabía si las otras dos estaban enteradas de las actividades y vidas de sus ex parejas, aunque después del Bed-in for peace, imaginé que Alice ya sabría algo y Pam mantenía un contacto bastante cercano con Ringo, posiblemente ellos ya habrían hablado de sus asuntos.

Subimos al cuarto de Montse, de nueva cuenta y pusimos un poco de música, con nosotras llevamos el alcohol y disfrutamos de aquello como si fuera una fiesta de adolescentes y el vivir de nueva cuenta una experiencia así con mis amigas, me hizo sentir plena.

-Bien María, es momento de que hables de todo lo que sabes- me pidió Alice

-¿Sobre qué?

-No te hagas… de los Beatles, supimos que volviste con ellos.- dijo Pam

-Oh sí, volví con ellos, con la grabación de “Let it be”, fue un poco difícil. Pero en esencia, ¿qué quieren saber de ellos?

-¿Es verdad que Lennon anda con la pelirroja? Los televisaron por su movimiento pacifista.

-Oh sí. Se llama Delilah y al parecer ese día formalizaron su relación.

-¿La conoces?

-Sí…- eso se volvía un poco incómodo

-¿Es amiga tuya?

-Las nuevas chicas de los Beatles lo son…- contesté un poco cohibida por sus miradas.

-Qué raro…

-Bastante…

-Yo ya sabía que Ringo andaba con alguien ¿Cómo se llama?

-Kate

-¿Y quién anda con Paul?- preguntó Alice

-Eso ya lo sabe Montse- contesté

-Pero nosotras no- agregó Pam y rieron

-Es mi prima, Sofía.

-Wow ¿de verdad?

-Sí

-Lo logró- dijo Alice y Montse las miraba con desaprobación.

-Ay vamos, estás por casarte, no exageres- dijo Alice y Montse sonrió un poco.

-¿Es todo? Al menos yo ya sé que Montse se casará con Jasso, Alice anda con Best y…

-¿Oye Alice es verdad que Pete vende pan?- preguntó Montse y las demás reímos porque éramos crueles con nuestra perspectiva de Best vendiendo pan.

-Tiene panaderías, sí y le va muy bien, no tiene nada que ver con aquel chisme cruel que le inventaron.

-Oye sólo era una pregunta- dije ante el mal humor de Alice.

-¿Y tú sales con alguien Pam?- pregunté y ahora los reflectores iban hacia ella.

-Sí, es un chico que también da clases en mi escuela. Enseña lenguas extranjeras, es muy guapo, maduro y convive ya con mis hijos.

-Me alegra oír eso

-Lo sé, me gusta que se trate de alguien nuevo.

-¿Y tú? Sabemos que andas con un músico ¿Pero quién es?- preguntó

-Uhmm… ¿Han escuchado a Pink Floyd?

-Desde luego

-Obvio

-Entonces saben quién es David Gilmour- las tres dejaron de hacer lo que hacían para mirarme con asombro.

-¿Es en serio?- preguntó Alice

-Entonces sí lo conocen

-¿Crees que no iba a investigar a un chico guapo que se apellidara igual que yo?- preguntó divertida.

-¿De verdad andas con él?- preguntaron

-Claro, ¿por qué la sorpresa?

-¿Por qué? Porque está hermoso… su cabello, su expresión- decía Pam

-Esos labios rojos y esa súper espalda…-agregó Alice

-¡Esas nalgas, por dios!-Gritó Montse y solté a reírme. Estaba acostumbrada a que las chicas en general murieran de amor y deseo por los Beatles, con Pink Floyd la situación era un poco distinta por el hecho de que ellos querían manejar un bajo perfil que los mantenía un poco alejados de la lente; que las chicas hicieran esos comentarios sobre David, me era extrañísimo.

-Montse te recuerdo que estás por casarte…

-Y eso qué, la vista es muy natural. Además no vendrás a decirme que de sus cualidades, esa es la que más te gusta.- las otras dos asintieron con obviedad.

-No podré mentir con algo como eso- dije riéndome.

-¿Y cómo es él?- preguntó Alice

-Es increíble, en todo aspecto…

-¿Y todas las actividades?- preguntó Montse con una curiosidad bastante insinuante.

-Sí, en TODAS- contesté riéndome.

-¿Vendrá a la boda de Mon?- preguntó Pam

-No, tenía mucho trabajo por hacer, es un poco triste.

-Vaya que sí…

-Pero bueno, por qué no subes el volumen y continuamos con el festejo.- comenté y así sucedió. Dormimos todas ahí y despertamos hasta el medio día del sábado; caminé hasta mi casa con la peor de las resacas, entré por la parte de atrás y sin hacer ruido. Me bañé, me cambié y me recosté un buen rato.

Para las cuatro de la tarde decidí arreglarme lo mejor que pude, me sentía mejor y bajé para saludar a mi padre y a mi pequeño hermano, con quienes platiqué por horas sobre mis muchos trabajos, viajes y aventuras (salvo las que tuve con distintos músicos). Ellos también me hablaron sobre la visita de George a casa, parecían emocionados de volver a tener contacto con él y mi padre haría mención, muy a su manera, de lo mucho que le entristecía que hubiera obrado mal, trayendo como consecuencia, nuestra ruptura.

¡Qué recuerdos! ¡Qué tiempos aquellos! 

Las amigas de Liverpool y esto se va a descontrolar... la verdad no, no sabía que decir. 

Ya era justo y necesario publicar, así que disfruten el capítulo.

Gracias por sus comentarios, espero volver pronto, pero no prometo nada.

Pase un excelente Lunes (si es que es posible)